El multipremiado Bilibo es ampliamente reconocido como uno de los juguetes de juego abierto más innovadores y versátiles. Sencillo y mágico, su icónica forma de concha y sus vibrantes colores cautivan a los niños. Despierta la curiosidad, estimula la imaginación y entrena lúdicamente las habilidades motoras básicas y el equilibrio.